Hay 3.6 millones de mexicanos con trastorno de epilepsia

Jorge Treviño Welsh, encargado de neurología de pregrado del Tecnológico de Monterrey, explicó que la epilepsia es uno de los trastornos neurológicos crónicos más frecuentes que afecta a personas de todas las edades.

“En el mundo 50 millones la padecen y en México, 3.6 millones, de los cuales 75 por ciento inician en la edad pediátrica”, dijo.

Resaltó que “afortunadamente la mayoría de los pacientes con epilepsia logran controlarse con un medicamento antiepiléptico “.

Los efectos secundarios
Sin embargo, apuntó, el 20 por ciento de ellos requieren el uso de dos o más medicamentos, lo cual puede incrementar el riesgo de efectos secundarios.

Destacó que una gran proporción de personas con problemas de epilepsia se registran en los estados del centro de la República Mexicana, en donde prevalecen altos niveles de enfermedades infecciosas.

Esta enfermedad, indicó Treviño Welsh, es provocada por un desequilibrio en la actividad eléctrica de las neuronas de alguna zona del cerebro, es "como un cortocircuito".

Refirió además que se caracteriza porque produce crisis epilépticas recurrentes, las más frecuentes manifestadas por movimientos convulsivos y en otras ocasiones alteración de la alerta.

Alucinaciones
También se presentan alucinaciones, periodos de amnesias, trastornos conductuales, trastornos sensitivos siempre auto-limitados y de corta duración, añadió.

Detalló que las causas son diversas, en el que a nivel prenatal y perinatal es por factores que disminuyen la oxigenación cerebral, alteraciones metabólicas, neuroinfecciones, malformaciones del cerebro, accidentes, tumores, eventos vasculares cerebrales, entre otros.

Las crisis epilépticas, dijo, pueden producirse en cualquier área del cerebro, pueden ser breves , en cuestión segundos, o no detenerse , al caer en estado epiléptico, y ambos casos pueden ser aislados y esporádicos o ser repetitivos.

La estigmatización social
Advirtió que cuando las crisis epilépticas son prolongadas y repetitivas deterioran las habilidades cognitivas, motoras, pueden presentar regresión de habilidades previamente adquiridas e incluso condicionar la muerte del paciente.

“Cuando el paciente no logra el control adecuado con la combinación de fármacos antiepilépticos y continua presentando múltiples crisis epilépticas requiere el uso de tratamientos especiales como el estimulador del nervio vago“, explicó.

El especialista manifestó que la discriminación y la estigmatización social que rodean a la epilepsia en todo el mundo son a menudo más difíciles de vencer que la propia enfermedad.

Los prejuicios
Expuso que las personas que viven con epilepsia pueden ser objeto de prejuicios y puede hacer que los afectados y o la familia no busquen atención médica para evitar que se les identifique con la enfermedad.

Treviño Welsh subrayó que son múltiples las limitaciones que tiene que enfrentar el paciente con epilepsia, como los es el ingreso a guarderías, escuelas, puestos de trabajo, acceso a seguros médicos, entre otros.

Este padecimiento, enfatizó, llega a tener un alto impacto socio económico en las familias, sobre todo cuando los tratamientos son muy prolongados.

Por su parte, Samuel Pérez Cárdenas, neurocirujano con subespecialidad en cirugía de Epilepsia del Hospital Universitario (HU) destacó que México cuenta ya con la neuroestimulación como terapia para ciertos tipos de epilepsia.

La terapia VNS
Esto, dijo, beneficiará a pacientes que no son candidatos para cirugía cerebral, que no desean someterse a una cirugía cerebral, con cirugía cerebral fallida, con crisis de difícil control y personas de cualquier edad (niños, adolescentes, adultos, ancianos).

Mencionó que el tratamiento con VNS - de estimulación del nervio vago - tiene un enfoque único desarrollado específicamente para las personas con epilepsia de difícil control.

Más de 65 mil personas en todo el mundo, refirió, han elegido esta terapia, sin los efectos secundarios que suelen estar asociados a los medicamentos, como la depresión, los mareos, la confusión, los cambios de peso, el cansancio y los problemas para dormir.

La terapia VNS, explicó, no es un medicamento y no requiere una cirugía cerebral y por ser una cirugía poco invasiva, generalmente el tiempo de estancia hospitalaria es corto, varía en cada uno de los pacientes, pero en promedio son 24 horas.

NTX/GRR/LBR/AER/AEG/DAW