¿Estudiar o no en el Colegio de Sonora?

Esta es una pregunta que muchas personas nos hemos hecho y otras más se siguen haciendo a la hora de buscar opciones de posgrado en el área de las ciencias sociales en Sonora y Hermosillo.

Como egresada de la maestría en Ciencias Sociales puedo decirles que en mi vida hay un antes y un después del Colegio de Sonora. Mi visión del mundo y las problemáticas sociales se amplió significativamente, los egresados adquirimos una nueva interpretación del quehacer científico en la materia social, aunque se encuentre en su lucha por reconocimiento en el campo de las ciencias; mi compromiso con la investigación y las causas sociales se fortaleció y pude comprender la importancia de la acción acompañada de la investigación, como una mancuerna poderosa que no tiene más limite que los nuestros; el prestigio de la institución me ha abierto muchas puertas, porque el nombre del Colegio de Sonora habla por sí solo y he podido hacer mío un poquito de esa seriedad y dedicación; inclusive la manera en la que me concibo y la seguridad en mi misma, han mejorado.

Les voy a platicar que significa estudiar en el Colegio de Sonora (claro está desde mi propia experiencia). Entrar a los edificios del Colegio, que datan desde el siglo XVII, es comenzar un viaje lleno de historia, cultura y fascinación, la puerta en arco en el edificio principal te da la bienvenida, los maceteros te invitan a pasar al fondo el recinto, los equipales te invitan a sentarte y ver pasar el tiempo, ocasionalmente hay exposiciones de pintura o fotografía que acompañan el ambiente.

Los maestros y el personal son personas siempre dispuestas a cooperar y darte la mano, habrá gente difícil como en todas las instituciones, pero dependerá de ti un mal o buen resultado; los grupos de estudiantes somos pequeñas comunidades muy plurales con una riqueza inigualable de ideas y formas de pensar, puedes encontrarte desde la mamá que vive rápido entre casa y tres hijos, hasta el hipster recién salido de la universidad queriéndose comer el mundo; las puertas del colegio están abiertas las 24 horas del día para trabajar, su centro de cómputo esta siempre disponible (no recuerdo nunca haberlo visto saturado), la biblioteca esta siempre dispuesta a prestarte libros y si no los tiene ¡los pide!, tienes acceso a una variedad de repositorios, compilaciones y revistas de trabajos académicos nacionales a internacionales; hay espacios para publicación de tus ideas e investigaciones en medios locales y en sus propios medios de difusión, desde tu inicio como estudiante e incluso después de egresar; tienes apoyo económico y oportunidad de viajar a congresos, presentar tus avances, hacer estancias y cursos en otros países; tienes la oportunidad también de publicar en su revista “Región y Sociedad”, que es una de las más prestigiadas a nivel nacional e internacional.

La discusión de ideas es el principal alimento de las aulas y todas las opiniones tienen cabida, es una institución exigente, por que así debe serlo y así lo exige la calidad académica que ofrece, pero los frutos de un trabajo bien hecho son para toda la vida. El Colegio es una institución que te da a manos llenas cuando lo sabes retribuir, por eso y muchas otras cosas más en este 35 aniversario me siento muy orgullosa de ser parte del Colegio de Sonora y aunque no esté ahí físicamente sigo gozando de espacios y oportunidades para promover mis trabajos a investigaciones. Te invito a que formes parte del Colegio de Sonora y colabores en el crecimiento y desarrollo que esta institución ofrece al estado de Sonora. Muchas gracias al Colegio de Sonora por todas las oportunidades que me han dado y ¡muchas felicidades por su aniversario!

Lizette Sandoval*Egresada del programa de maestría en Ciencias Sociales por El Colegio de Sonora

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