Anticipación de vísperas
Incontinentes, Delfina y Alfredo, Alfredo y Delfina, cayeron en lo mismo que jamás ha tenido sentido: apresurarse a decir que ganaron la gubernatura mexiquense.
Impensable que los dos ganaran.
Con lógica impecable, Juan Zepeda (vaya perla con que cuenta el PRD) lo dijo muy bien ayer: los demócratas genuinos contienen sus ansias y, antes que celebrar vísperas, aguardan los resultados de ley.
La inercia de la política vulgar que se practica en México ha vuelto a manifestarse.
Urge que lleguen los días en que, en lugar de contribuir a la siembra de sospechas, los buscadores de poder en cargos de elección abran la boca únicamente con resultados inobjetables para celebrar triunfos o felicitar al adversario favorecido por la mayoría de los votantes.
Bien que la autoridad electoral del Edomex acatara la ley con su conteo rápido de un significativo 75% para no quedar en entredicho, pero muy riesgoso que Del Mazo festejara cuando en el PREP, aún con un triste veintitantos por ciento de lo verificado, lo aventajaba la profesora…